El escultor Folía y sus estancias en Salamanca


Juan Bautista Folía, retrato publicado en la Revista
Cántabra del 21 de febrero de 1909



Por José María Hernández Pérez
15/08/2025 Rev. 0



Joan Baptista Folía y Prades

Nace en Sant Jordi del Maestrat en Castellón el 8 de febrero de 1881 de una dinastía de vinateros y labriegos de Vinaroz. En su infancia va a la escuela en esta localidad y al destacar en dibujo, ayudado por el filántropo José Esteller pasa a Castellón, siendo alumno del taller de Vicent Castell y Domenech, coincidiendo con Juan Bautista Porcar Ripollés, arqueólogo, escultor y pintor luego, con el que comparte sueños artísticos y camastro para dormir.

Se traslada la familia a Barcelona y entra como aprendiz en una imprenta y se convierte en pintor de brocha gorda antes de ingresar en el taller del artesano dedicado a las imágenes religiosas señor Soler, quedando bajo la tutela de José Capmany.

Aprendiz en el taller de Venancio Vallmitjana, un día, en la desaparecida fundición Masriera y Camnis, estrecha la mano de Mariano Benlliure que está fundiendo el monumento a Gayarre. En Madrid trabaja en el taller de Agustín Querol y en 1902 sale pensionado, pero no a Roma, como le había indicado su maestro, para ocupar la plaza que había dejado por fallecimiento el también castellonense Viciano, sino a París y con José Clará instala su estudio en Montparnasse, cerca del boulevard Clichy. Va a la Academia y frecuenta el estudio de Augusto Rodín, del que se hace gran amigo. De regreso, en Barcelona recibe enseñanzas de Clará, Querol y Benlliure. En 1902 talla “Campesina italiana” arte de contenido social, manteniendo la misma beca de París.


“Campesina italiana”, 1902. Imagen publicada en 
El escultor B. Folía de Joan Ferreres i Nos


Ingresa en la Real Academia de san Fernando en Madrid y por sorteo le toca cumplir el servicio militar en el Batallón de Lanceros de Borbón, número 4 de Caballería, destacado en Salamanca, a cuyo mando se encuentra el Coronel González Anleo. Mientras los quintos de su reemplazo juran bandera el día 13 de abril de 1903 él ha desertado, ocultándose en Olot y pasando luego a Francia, refugiándose en París a la sombra de Rodín y consiguiendo con su obra “Fragment de Tombeau” o “Tumba”, Medalla Honorífica en el Salón de Artistas Franceses, en 1904, que regala a la Academia de san Carlos de Valencia. 


Tumba, 1904. Imagen publicada en
El escultor B. Folía de Joan Ferreres i Nos


Presentó además “Cabeza de estudio”.

Discípulo, amigo y admirador de Rodín, dijo: “Ha sido mi gran ídolo. Maestro esencial primero y amigo después, Rodín es uno de los grandes artistas de la época. Me impulsó a asumir unas tendencias propias y afirmar mi estilo y personalidad como escultor”. Con él como referencia produjo: “Cabeza de niña”, “Familia”, “Composición” y “El Lañador”, figura sedente en escayola, una de sus primeras obras en la Academia que envía a Castellón, como justificación de la beca y que hoy se encuentra en el Museo de Bellas Artes. Posteriormente hizo otra figura de “El Lañador”, una estatua de gran tamaño. 

Establece contacto con el mecenas Víctor Balaguer y Cirera, del que realiza varios bustos, hoy en la Biblioteca-Museo fundada en 1884 por el prócer, en Villanueva y la Geltrú. 

Cuando es capturado tras su deserción del ejército, su primer protector Esteller, consigue que se le considere como soldado recomendado y en Castellón ejecuta su obra “El medallón de los Reyes”, objeto de miles de reproducciones. Conducido a Salamanca como preso preventivo al Cuartel de Caballería de Albuera, es objeto de una entrevista por el reportero Fernando Felipe el 23/10/1906  : De barba despeinada, la mirada de miope, fuma en pipa y lleva en la ropa salpicones de barro. Habla en castellano con mezcla de valenciano, catalán y parisino. Tiene ejecutados los bustos del coronel Fernando Lastras, teniente Vallejo y se encuentra esbozando el del teniente Soler, al lado del cual se encuentra una Virgen con el Niño en brazos en escayola. Tiene caminar rápido, aires de músculos juveniles, abundante cabello gris y bombeada frente, pasados unos años.


Fernando García de Lastra, 1905. Imagen publicada
en El escultor B. Folía de Joan Ferreres i Nos


En 1906 es premiado con Mención Honorífica en la Exposición Nacional de Madrid por su obra “Mari-Juana”, busto en  yeso elaborada en Salamanca. También salen de sus manos en la ciudad del Tormes, “Injusticia”, “Familia”, “Jubilación del obrero” y es condecorado con la Cruz de mérito de Alfonso XII en la Exposición de Madrid de 1912 por su obra “Buscando belleza”. Durante su estancia en Salamanca trabaja para los Ayuntamientos de Bilbao, Vitoria, San Sebastián y Santander en las obras mencionadas que tienen contenido de temas sociales. 

Tras el Consejo de guerra, se le condena a ser deportado a Mahón, donde le ayudará Santiago Rusiñol, quien le compra su obra “Cabeza de Cristo”, mientras Ramón Casas adquiere “Rosa”. 

En la Exposición Internacional de Barcelona de 1907 consigue una Segunda medalla, con una de las obras hechas en Salamanca, “Los bohemios”, mención que vuelve a obtener en la de Madrid de 1908 con “Despertar” y en la Nacional de Valencia de 1909, aunque no he conseguido localizar la obra premiada, pues no figura como presentado.


"Los bohemios" o "Vida bohemia", 1907. Imagen publicada
en El escultor B. Folía de Joan Ferreres i Nos


El jueves 2 de abril de 1903 una manifestación de estudiantes universitarios provocó la desmedida actuación de la Guardia Civil, con descargas de fusilería y resultado de muerte para dos estudiantes y varios heridos de consideración.

Federico García Gómez, alumno de preparatoria de la facultad de Derecho muere en el piso superior de la Universidad y en la carga del Instituto muere Hipólito Vicente García, alumno de 2º curso de Medicina. Fueron enterrados, respectivamente, en los nichos nº 59 y 51 de la galería de san Antonio, tras un sepelio multitudinario, como no se había visto en Salamanca.

La ciudadanía pidió la destitución del Inspector Serapio Benito y del Gobernador Civil Joaquín de Velasco. Por la tarde, reunidos los estudiantes, tomaron diversos acuerdos, entre ellos costear las coronas fúnebres, que se sacaran mascarillas de sus rostros para colocarlos en el Paraninfo de la Universidad e iniciar una suscripción para erigirles un mausoleo.

Los estudiantes valencianos fueron los más implicados y adquirieron una lápida de mármol blanco, hecha por el escultor Antonio Alejo, que llevaron a Salamanca en el primer aniversario, con la inscripción: A la memoria de los estudiantes víctimas de los sucesos de Salamanca en dos de Abril de 1903, dedican este recuerdo los estudiantes valencianos. 1903.

Pasaron los años y no se había decidido dónde se colocaría la lápida y al fin en 1906 se puso en el ala derecha del Patio de Escuelas, entre los dos primeros balcones situados frente al lado de la Secretaría General de la Universidad. 

La cifra recaudada, siendo Tesorero el Rector Unamuno, fue de 2.000 pesetas y el estudiante José María de Onís propuso que se aceptara uno de los tres proyectos que el marmolista Ángel Seseña estaba dispuesto a realizar, para ser colocado el 2 de abril de 1907, pero se recibió una propuesta del escultor salmantino señor Petit, que realizaría la escultura de forma gratuita. Aparte del poco entusiasmo que iba quedando y para colmo de males, murió el escultor de forma repentina el 18/08/1907 poco después de haber recibido la medalla de Oro de la Exposición Regional celebrada en el recién inaugurado Mercado Central, por su obra “Melancolía”.

Continuó paralizado el proyecto más de un año y disponiendo todavía de 1.600 pesetas, en marzo de 1909, Folía se ofreció a realizar el proyecto. Se admitió la propuesta de Folía y se obtuvo el permiso del alcalde señor Pérez-Tabernero [sic]. (El alcalde era don Guillermo Hernández Sanz). Se colocó la primera piedra el 19/04/1909. 

A las 12 horas del día 23 de mayo de 1909 se inauguró en la plaza de la Libertad de Salamanca el monumento a los estudiantes muertos que consistía en un sencillo obelisco proyectado por el arquitecto Santiago Madrigal, ejecutado por el escultor Juan Bautista Folía Prades, profesor de la Escuela de Artes y Oficios, cuyo nombramiento había sido propiciado por Unamuno. 


2 de mayo de 1909, plaza de la Libertad. Inauguración del
monumento a los estudiantes muertos el 2 de abril de 1903,
foto García para ABC


En el frente del pedestal lucía la inscripción: “A SUS COMPAÑEROS, / VÍCTIMAS DE LOS SUCESOS / DEL 2 DE ABRIL DE 1903, / DEDICAN ESTE MONUMENTO, / COSTEADO POR SUSCRIPCIÓN, LOS ESTUDIANTES DE SALAMANCA. / 2 DE MAYO DE 1909”. En los laterales aparecían los bustos de Hipólito Vicente y de Federico García. Entre ambas efigies se encontraba el escudo de la Universidad. Coronaba el obelisco la fecha 2 de abril de 1903 y fue demolido en 1936.  El proyecto del monumento estuvo expuesto en los escaparates de la librería de la Viuda de Calón en marzo de 1909.

En sesión del Ayuntamiento salmantino de 19 de agosto de 1908, se dio lectura al informe de la Comisión sobre la instancia de los señores Juan Bautista Folía y Ángel Seseña solicitando la plaza de modelado y vaciado de la Escuela de Artes e Industrias. Se aprueba el dictamen por el que los aspirantes harán una memoria inédita que presentarán a la consideración de S. E. En sesión de 23 de setiembre se procede a la votación de la citada plaza, resultando elegido Juan Bautista Folía Prades con 7 votos, contra 2 votos obtenidos por Ángel Seseña García. Hay 2 votos en blanco. 

En agradecimiento al Rector, que tanto le había ayudado, en 1907 esculpió su busto de 63x50x27 cm, para ser visto frontalmente con barba, la mirada baja, sin gafas y tallando el iris del ojo, vistiendo chaqueta abierta que deja ver el chaleco cruzado con 5 botones (3 al derecho y 2 al izquierdo), por encima del que asoma el cuello de la camisa. Basamento de piedra irregular. Se encuentra en el recibidor de la primera planta de la Casa Museo de Unamuno. El mismo año realizó la reproducción en escayola de la mano (10 x 33 x 15 cm) y el antebrazo derechos. Ambas esculturas se conservan en el mismo Museo. 


Busto de Unamuno de Juan Bautista Folía, 1907.
Fotografía de Elena Diaz Santana, Asoc. Amigos de Unamuno


En 2014 se hace una réplica en bronce del busto de Unamuno y se le protege con una vitrina de cristal y en 2017 se anuncia que Salamanca obsequiará al Congreso de Diputados con un busto de Unamuno, réplica del existente en la Casa Museo, ya que fue Diputado entre 1931 y 1933.


"La mano de Unamuno", 1907, Imagen publicada en El escultor B. Folía de Joan Ferreres i Nos


De 1908 es su obra “Despertar”, hecha en Madrid.

Al iniciarse 1909, abre un estudio en la plaza de san Bartolomé donde pretende dedicarse fundamentalmente a la escultura religiosa, el taller recibe el nombre de El Sagrado Corazón.


Anuncio en El Adelanto de 1909

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El 2 de noviembre de 1909, en sesión del Ayuntamiento, se aceptó la renuncia del señor Folía a la plaza de profesor de la Escuela Municipal de Industria. Folía abandona Salamanca e inicia un amplio periplo por España.


En el busto en yeso de Menéndez y Pelayo del interior de la biblioteca de su nombre en Santander, al eliminar las capas de pintura apareció la firma de “B. Folia” y el año “1912”, inscritos en una pequeña cartela de la base y el escudo de Santander en el ángulo inferior derecho. Lo había donado el escultor en el mes de octubre al Ayuntamiento “para que según este modelo se mande hacer el busto en bronce” reproducción que se instalaría en el Palacio de la Magdalena, cuando se entregaran las llaves a los Reyes en ese año.


Folía trabajando en el busto de D. Marcelino Meléndez Pelayo (Archivo familiar)

Busto original en yeso de 1912

    

Reproducción del busto en bronce de 2009



Reproducido en bronce, en mayo de 2009 quedó instalado en el vestíbulo del Palacio sede de la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo.

En 1913 sale a concurso el monumento al Centenario de Donostia-San Sebastián y el segundo proyecto es presentado bajo el título “Amor a la Patria” por los escultores Emilio Molina, Miguel Picas y Folía que habían trabajado en la decoración escultórica de la Catedral nueva de Vitoria. Se completaba el monumento con 4 figuras enfrentadas: “Amor a la Patria”, “Abundancia”, “Paz” e “Historia”, con la escultura de pie de la reina María Cristina, valorado en 120.000 pesetas y cambiando la piedra de Novelda y el bronce por mármol rojo de Alicante. 

No resultaron ganadores pero el Jurado estimó que el accesit desierto de 1.500 pesetas se le adjudicara a los autores de “Amor a la Patria”.

Llega a La Senia después de trabajar en mayo de 1913 en Madrid decorando el monumental “Arco de Roma”, reproducción del de Tito, en la Plaza de Neptuno para la celebración de las Fiestas Constantinianas, bajo la dirección del arquitecto Avila y la colaboración del decorador Francisco Clivelles.

Contrae matrimonio Folía el 1 de enero de 1914 con la viuda de Agustí Forcadell Palau, Irene Monner García, natural de La Senia, con la que tuvo dos hijos: Juan e Inés y no puede marchar a Chile, instado por su amigo y protector en Barcelona, Campins para labrar una estatua conmemorativa del héroe nacional Alonso de Ercilla y Zúñiga, autor de “La Araucana”, tan pronto como era su deseo, dada la gran cantidad de trabajos que tiene encomendados, por lo que no esculpe el monumento. 

Entre los trabajos se encuentran dos bustos de la familia Martorell-Palau, uno de Martín Martorell García y el otro de su hija Ester Martorell Palau y con el rector de la parroquia Joseph Gabaldà se compromete a hacer la talla de un Cristo y la de una Dolorosa, obras que esculpe en la vivienda del médico José Ferreres y que lucen ya en Semana Santa.

Se compone un Himno a las Fiestas Constantinianas de La Senia, en noviembre de 1913, con letra de Juan Bautista Salomón y música de Francisco Tapbioles, que en la penúltima estrofa dice: “¡Gloria a Jesús! en Cruz enclavado. / ¡Gloria a María! Reina del dolor. / ¡Gloria a los fieles! que han costeado / esas joyas de Folía escultor”. (Desaparece la obra religiosa con motivo de la guerra civil).

Pensaba desplazarse a Bilbao, pero tampoco lo hace y embarca hacia Santiago de Chile viviendo allí 4 años y uno en Argentina trabajando para los “nuevos ricos”, Figueroa, Larrain, Lagos, Pereira y Estrada. “Pereira” es Premio Nacional de Chile. En el mismo año talla el “Busto a Manuel Estrada Cabrera”, en bronce, de 78 x 50 x27 cm, fundición Trivium, para el Museo de la Cámara de Diputados de Argentina. 


Folía en Chile en 1915


Ejecuta los monumentos a los héroes de la independencia el teniente coronel Ricardo “Eleuterio Ramírez”, “El León de Tarapacá” en 1915. El de “Manuel Rodríguez” parece ser de Carlos Canot de Bon y el fundidor Folía, aunque en la base de la escultura la firma es de Folía.

Ejerce como profesor de modelado en la Universidad Católica de Santiago de Chile, donde han quedado parte de sus obras de mármol en el patio central. Trabaja para congregaciones religiosas. De 1917 es su obra “Danza”.

En la Exposición de octubre de 1917 en la Casa Eyzaguirre, presenta: “Extasis”, “Crimen”, “Bacante”, “Dolor”, “Soledad” y pequeños terracotas y mármoles que regala a museos chilenos y argentinos.

La “Batalla de Maipú” la esculpe en 1918, como mural conmemorativo en   Buenos Aires, además de las figuras en piedra de la parroquia de san Miguel.

Pasa por París para asistir a la inauguración del “Museo Rodín”, el 4 de agosto de 1919 en el Hotel Biron, volviendo a España para instalarse en Barcelona, dando clases en la Escuela de Bellas Artes de Montjuich, que preparaba la Exposición Universal. Se traslada con la familia a Castellón para veranear en 1922 y marcha solo a Santiago de Chile para realizar la decoración interior del convento de las Madres Agustinas, realizando su obra cumbre de 400 capiteles distintos y 90 metros de friso cortado en piedra con motivos religiosos y figuras de tamaño natural sobre la obra de san Agustín de Hipona, donde figuran los “Cuatro Doctores de la Iglesia” y el monumento en el monasterio de “Paray le Monial” de la comunidad jesuita.

Efectúa también un busto de Guardiola y otro de Alfonso XIII para el Club Español. 

A la Exposición de Chile en 1926 presentó: “Campesina valenciana”, en madera,  Busto retrato de L. L. v. de Pereira y busto retrato de la señorita Carmen Puchalt, en yeso.

Regresa en 1926 a la ciudad condal donde presenta su obra “Cultura” y realiza varias reproducciones en yeso para el establecimiento comercial “El Indio”, tienda modernista del Raval. Pasa largas temporadas en Valencia, Castellón, Torrent, Alfafar y Madrid y en 1930 y durante su estancia en Barcelona ejecuta el “Cristo yacente”, obra religiosa sombría de alabastro de 52 x 34 x 12 cm, donado por su hijo a la Real Academia Catalana de Bellas Artes de san Jorge de Barcelona el 16/02/2001. Talló a principios de  1932 las obras “Frances Maciá” y “República”.

En la calle de Enmedio 5, de Castellón, en la Casa Forés, cerca de las Cuatro Esquinas, existe un “Mercurio” con sombrero de ancha ala, sandalias aladas y con un saquito marsupial en la mano derecha, símbolo de la riqueza y a los pies el caduceo y la cornucopia simbolizando la abundancia.

Viviendo en Madrid en 1932 en la calle Pacífico 12 presenta a la Exposición Nacional de Bellas Artes en el pabellón segundo, sección cultura, con el número 15 “La Venus de la tanagra” en escayola, exposición en la que también está presente Inocencio Soriano Montagut, con la obra “Mi madre”.


Terracota promocional de licores de
 Julián Segarra Ferreres, obra de Folía


Julián Segarra Ferreres fabricaba licores en San Jorge y en 1930 conoce a Folía, entretenido en hacer manualidades en su casa. Le propone fabricar unos calendarios para regalar a los clientes de su destilería y aceptado por éste, le presentó un boceto en el que aparecía el busto del fabricante y una valenciana a cada lado, lo que no fue muy del agrado de su esposa Vicenta Ortí Ferreres. No convenció el boceto por estar hecho en escayola y le propuso hacerlo en arcilla cocida (terracota) en el vecino pueblo de Traiguera. Cambió los motivos y aparecía una valenciana cubierta con un mantón al estilo de las cotanetes de La Jana, invitando a una degustación de su anís dulce destilado de la semilla de matalahuga, portando un vaso en la mano derecha y en la izquierda una original botella de molde propio, imitación de la bandera de Aragón y luciendo en el pecho dos rosas. El conjunto medía 54 x 43 cm. Todos los días se desplazaba en bicicleta, hasta que, al principio de la guerra al pasar por Pou de les Serretes y presenciar las atrocidades cometidas, suspendió sus trabajos y no entregó, los calendarios terminados.

Marchó a Barcelona inmediatamente, llegando a tiempo de participar en la Exposición de Primavera de 1937, celebrada en el vestíbulo superior del ferrocarril de Sarriá, en la plaza de Cataluña, donde presentó: “19 de julio” y “Cabeza de mujer”. 

La “Casa Folía” y su artística fachada la construyó durante su estancia en sant Jordi entre 1934 y 1935. En el conjunto escultórico destaca un indiano, en la parte alta dos querubines con los frutos del campo y en el centro la cara de una diosa de la abundancia. 


Casa de Folía en Sant Jordi (fotografía del ayuntamiento de Sant Jordi)


En 1938 y a instancias del coadjutor y organista de la iglesia arciprestal de Nuestra Señora de la Asunción de Vinaroz, don Vicente Enrique y Tarancón, luego Arzobispo de Toledo, Primado de España y Cardenal, al reformarse la capilla de la Comunión, adosada a la iglesia y datada en 1667, fue incorporada una imagen de la “Virgen de las Angustias” o “Dolorosa”, talla policromada y otra de “san Antonio de Padua”, sufragadas por el cofrade Juan Bautista Polo Esteller, “Marietet”, obras de Folía, que se había instalado con su hijo en la calle Herrero, 11, de Castellón. Hace unos años se reincorporó al altar la “Virgen de las Angustias”.

En 1939 y en Alfafar (Valencia) realiza el “Mausoleo Ridaura”, encargo de la burguesía valenciana y un busto del General Aranda.

En 1941 se le encarga la restauración del altar mayor y los lienzos laterales de la ermita de san Nicolás de Bari. Entre las imágenes se encuentran la de san Nicolás, la de los 3 niños asesinados y cocinados por un tabernero, siendo resucitados y del padre suplicante, obra de Cristobal Maurat. La tradición navideña de dejar regalos en los calcetines se relaciona con que san Nicolás, enterado de que un hombre pobre se dispone a vender a sus hijas, deja caer unas monedas de oro por la chimenea, que van a caer en unas medias allí colocadas para su secado.

En 1945 lleva viviendo en Castellón desde hace algún tiempo en la calle de Herreros, 11 y sus últimos años los pasa en Onda, atraído por su cerámica, donde ha montado un taller de imaginería religiosa, falleciendo el 16 de julio de 1945, tras caer del andamio en la iglesia mayor donde se encontraba restaurando los retablos. 

En 1995 se instala una réplica del busto del pintor Francisco Ribalta, hecha en su tiempo, en la escalera principal del Instituto que lleva su nombre.

En la fachada del Banco de Castellón, en la Puerta del Sol, de Valencia lucieron dos de sus esculturas durante muchos años, encargadas por Fernando Gasset Lacasaña.Sus 427 obras localizadas se encuentran repartidas por Valencia, Castellón, Salamanca, Bilbao, Santander, Vitoria, Barcelona, Gerona, Tarragona, Madrid, Argentina y Chile. 




BIBLIOGRAFÍA

Juan Bautista Folia y Prades. Escultor universal discípulo de Rodín.- Salvador Bellés.

Salamanca en el ayer: Tres Ángel Seseña, escultores y marmolistasEstatuaria de Unamuno en el mundo y Los sucesos del 2 de abril de 1903.

Juan Bautista Folia Prades. El escultor de san Jorge.- Julián Segarra Ortí.

El escultor B. Folía.- Joan Ferreres i Nos. 

El Adelanto.