En Santander y según su partida de nacimiento nace a la una de la mañana del día 6 de marzo de 1881, en la calle de santa Lucía, 14, 2º piso, imponiéndosele los nombres de María Eustaquia Adriana Gutiérrez y Blanchard, hija de Enrique Gutiérrez Cueto, de Cabezón de la Sal y de Concepción Blanchard de Santisteban, de Biarritz. Abuelos por línea paterna, Castor Gutiérrez de la Torre, natural de Ucieda (ya fallecido, en 1866) y de Concepción Cueto y Sánchez, de Cabezón de la Sal, propietaria y vecina de Comillas y por línea materna, de Lorenzo Blanchard (hijo de N. Blanchard y de la polaca María Karvoski, natural Bayona), ya difunto y de su viuda Eustoquia Santisteban y Azcue, dedicada al comercio, natural y vecina de esta población. Unos días más tarde es bautizada en la parroquia de santa Lucía, siendo sus padrinos: la abuela materna Eustoquia Santisteban y su tío paterno Francisco Gutiérrez. En el Registro Civil no figura el apellido Cueto que era el segundo de su padre y que puede que con el tiempo se uniera con el Gutiérrez. Es la cuarta de cuatro hermanos: Aurelia (1/12/1877), Carmen, Fernando y Ana (1883).
| Don Fernando Gutiérrez Cueto pintado por su hija María Blanchard |
| | | Su familia pertenece a la alta burguesía liberal cántabra. Su abuelo paterno fue el fundador del periódico satírico “La Abeja Montañesa” en 1857 y posteriormente, en mayo de 1869, de otro denominado “Santiago y a por ellos” y nombrado Académico de la Real de la Historia en 1873, falleció 3 años después. Su padre, secretario de la Junta de Obras del Puerto, fundó “El Atlántico” en 1886. Su tío Castor Gutiérrez Cueto aparece envenenado en 1897, junto a su primo Eduardo, en la calle Menéndez de Luarca, en Santander por un error de la cocinera que puso veneno en la comida. Los Gutiérrez-Cueto eran 10 hermanos: Enrique, Domingo, Pedro Sixto, Fernando, Antonio, Ángel, Julia, Ana, Castor y Javier. Sus tíos los hermanos Domingo, abogado y Fernando, marino, colaboraron en “La Abeja Montañesa” al igual que lo hizo José María de Pereda y su madre Concepción, muy hermosa y de fecunda memoria recitaba poemas de los clásicos franceses. Es su padre quien alienta los primeros pasos de la niña “Cuca” en su afición por la pintura dándole clases de dibujo a partir de los 10 años mientras le busca una profesora particular y le fabrica sillas y caballetes adecuados a sus limitaciones físicas. |
Es escritor y estupendo pintor como se demuestra en los retratos que hace a su hermana Julia y a don Vicente Quirós, ambos hoy en la colección Carmen Díaz Ruiz de Calonge de Santander.
TRASLADO A MADRID
Tan pronto como cumple los 21 años, (mayoría de edad en la época), la envía a Madrid para seguir los estudios de dibujo y pintura, cosa que hace en el estudio del pintor Emilio Sala Francés en 1902, con Fernando Álvarez de Sotomayor a partir de 1906, quien le anima a que presente “Gitana”, a la Exposición de Bellas Artes, (hoy en el Museo de Arte Moderno de Santander). En ese año concursa para acceder a la Academia de san Fernando, pero no tiene éxito. En 1908 pinta “Aldeana bretona” y a partir de este año Manuel Benedito influye en que se interese por las naturalezas muertas. La Diputación de Santander le había asignado una beca en 1903.
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A la izquierda Emilio Sala Francés (Alcoy 1850- Madrid 1910) fotografiado por Kaulak en la Ilustración Española y Americana, en el centro Fernando Álvarez de Sotomayor y Zaragoza (Ferrol 1875- Madrid 1960) y a la derecha Manuel Benedito Vives (Valencia, 1875 - 1963) |
Muere su padre en 1904 en Bárcena de Pie de Concha buscando alivio a su incurable enfermedad y su hermano Domingo se hace cargo del coste de los estudios de María, su sobrina y se colegia en Madrid el 19 de julio de 1904, pues viene ejerciendo la abogacía en Santander y dirigiendo “El Atlántico”. Tras la muerte de su padre, deja de veranear en Comillas en la finca de su abuela Concha Cueto, viuda de Castor Gutiérrez y lo hace en Cabezón de la Sal en la casona de su tío Fernando, primo de Matilde de la Torre Gutiérrez, con la que coincide. En 1908 da clases a César Jenaro Abín, su único discípulo en España, que luego llegó a ser un excelente pintor, caricaturista y muralista.
La viuda y sus hijos se trasladan a Madrid y alquilan una vivienda en la calle Castelló, número 7.
Fue galardonada en 1908, con la 3ª Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes por la obra perdida “Los primeros pasos”, obteniendo la 1ª Medalla Julio Romero de Torres por su “Musa Gitana”. El 22 de setiembre de ese año se decide a solicitar de la Diputación de Santander una beca de 1.500 pesetas, para ampliar estudios en París, “en busca del ambiente y los elementos propicios a sus anhelos” y le es concedida por 3 años. El Ayuntamiento también le concede una beca de 1.000 pesetas. En estos años tiene como modelo de sus pinturas a la familia: En 1908 “Retrato de niña”, es una sobrina; 1910, “Aurelia leyendo” es su hermana y “Autorretrato”; 1912 en París, pinta “La Familia”, su madre Concepción Blanchard y ella junto a Ana, su hermana pequeña. De ese mismo año es “La Maestra”, su madre.
| Diego Rivera (Guanajuato, México, 1886-Ciudad de México, íd.,1957) |
| | | | Marie Vassilieff, (Smolensk, 1884-Nogent-sur-Marne, 1957) |
| | | | Juan Gris (Madrid, 1887- Boulogne-sur-Seine, 1927)
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En 1908 conoce en el Museo del Prado a Diego Rivera que tanto influirá en su vida durante más de 20 años y con el que viajará por España, Francia, Bélgica e Inglaterra y en 1909 se traslada a París con una carta de recomendación para la Superiora de un convento de monjas, donde se alojará a cambio de techo y comida y dará clases a las alumnas del colegio, que se reían de ella por su deformidad. Guardará hacia este convento un extraño rencor toda su vida como consecuencia de que era habitual la comida con carne de perro y la habitación era una celda infame. Asiste en 1910 a la academia de la pintora rusa Marìe Vassilief, con la que llega a compartir habitación y que es la primera persona que le da a conocer la existencia del “cubismo”. Se relaciona pronto con Juan Gris, seudónimo de José Victoriano González Pérez, con el que va a mantener a lo largo de su vida una entrañable relación en los niveles profesional y de amistad.
BECADA EN PARIS
Se habla de “cubismo” en la vivienda de Juan Gris en la rue Bateau Lavoir, 13 de la calle Ravignon, antiguo estudio de Kees van Dongen, que comparte con Pablo Picasso, nacido en 1881 como María Blanchard. Allí conoce a Guillaume Apollinaire, Max Jacob, Francisco Durrio, Vázquez Díaz y Manolo Huguet. Frecuenta la academia Vitti siendo su maestro Hermenegildo Anglada Camarasa y en 1910 consigue el 2º Premio en la Exposición Nacional, con “Ninfas encadenando a Sileno”, 190 x 220 cm. Recibe lecciones del propio van Dongen y en la academia Matisse conoce a Angelina Petrovna Belova, “Quiela”, pintora rusa recién llegada, con la que establece una buena amistad al pasar a vivir en el estudio de María.
| Kees van Dongen (Delfshaven, 1877-Montecarlo, 1968)
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| | | | Hermenegildo Anglada Camarasa (Barcelona, 1871-Puerto de Pollensa, 1959) |
| | | | Angelina Beloff (San Petersburgo, 1879 – México D.F., 1969) |
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Al finalizar el curso se van juntas a Brujas, emporio de los artistas y pintan en la playa de Knokke, sufriendo María los repetidos ataques de desalmados por sus defectos físicos, que le arrojan barro y arena a los cuadros, lo que la obliga a dirigirse a la Prefectura de Policía, logrando que le adjudiquen un gendarme que la proteja constantemente. Terminan tarde y se refugian en un café donde se encuentran con Diego Rivera y Enrique Friedmann y a partir de ese momento las dos parejas viajan y pintan juntos. Brujas le sirve de inspiración para el cuadro “Aldeana bretona”. Se llegan a Londres donde conocen la pintura de Hogart, Turner, Blake y demás.
A la vuelta de Brujas, Angelina se alojó en una habitación de la rue Champagne-Premièr y Diego en la rue Bagneux, mientras María había alquilado una en la rue Vaugirad, al dejar el hospedaje en las monjas, con lo que estaban separados por el convento de la Visitación.
Al estudio de Montparnasse acuden Picasso, Juan Gris, Lôthe, Modigliani y escritores como Gerardo Diego, Jacques Rivière y Paul Claudel.
En el verano de 1911 se llega a Granada, a ver a su hermana Aurelia que ha conseguido la cátedra de Paidología en la Escuela Normal y se encuentra con su madre. Allí pinta el “Retrato de la niña Regina Barahona”, su sobrina. En esta época afirma: En una imagen el arte empieza donde la naturaleza y la razón terminan. Se pasa por Santander para solicitar la prórroga de la pensión consiguiéndola por dos años más gracias a los buenos oficios de Anglada Camarasa y Enrique Menéndez y Pelayo. Regresa a París en 1912, instalándose con Diego Rivera y su primera esposa Angelina Beloff, en el 26 de la Rue de Depart, compartiendo casa y estudio. Vuelve a España en 1913 y al inicio de 1914, marcha a Mallorca con Angelina Beloff, Diego Rivera y Jacques Lipchitz.
VUELTA A ESPAÑA
A finales de año y carente de las pensiones económicas marcha a Madrid y se refugia en casa de su madre en la calle de Goya, 77, en el mismo edificio donde vive Concha Espina, esposa del primo del padre de María, Ramón de la Serna y Cueto, el novelista y poeta Ricardo León y el dramaturgo, novelista y crítico de arte José Francés. Se cuenta que Concha Espina tenía restringidas las visitas a su casa con una excepción: “Para la señorita María estoy siempre”. Coincide por estas fechas con su sobrina, la periodista Matilde de la Torre, hija de su hermana pequeña Ana y Eduardo de la Torre, que publicará en 1917 su primer ensayo titulado como uno de los cuadros de su tía, “Jardín de damas curiosas”. Comparte estudio en Madrid con Jacques Lipchitz.
| Jacques Lipchitz (Druskininkai, 1891 - Capri, 1973)
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| | | | Concha Espina (Santander, 1869 - Madrid, 1955)
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| | | | Matilde de la Torre Gutiérrez (Cabezón de la Sal,1884- México, 1946) |
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Vuelve de nuevo a Granada a casa de su hermana Aurelia y trabaja en un estudio de la Cuesta del Chapiz. Su hermana aprovecha para animarla a que deje la vida bohemia en París y haga oposiciones a Cátedra de Dibujo en Escuelas Normales, pues con el Plan de Francisco Bergamín, publicado por R. D. de 30 de agosto de 1914, podría presentarse a Profesor Especial en la especialidad de Dibujo. La convocatoria ha salido por Real Orden de 28/12/1914, publicada en el BOE del 15 de enero de 1915, con remuneración de 1.500 pesetas anuales y plazo de 2 meses para presentar la documentación. Va firmada por el Director General de Enseñanza Primaria que es el salmantino don Eloy Bullón Fernández.
De vuelta a Madrid acude diariamente a la tertulia de Pombo, fundada por Ramón Gómez de la Serna y de ella dice José Bergamín: Sigo viendo su imagen “mágica y doliente” y siempre al lado de la de Rivera, al claro de la luna interior de la cripta de Pombo, cuando Ramón hacía que encendiesen las lámparas de gas para iluminarlo todo de luz perla, y el hada de las migajas dolorosamente sonreía. Para Diego Rivera: Era asombrosamente inteligente. Un cuerpo era como una gran araña, que colgaba ligeramente ladeada y tenía una hermosa cabeza y unos brazos que terminaban en las manos más preciosas que jamás he visto. Era como su nombre (Blanchard) como un ángel nórdico de una escuela medieval de Hamburgo. La suya, como la de ellos, no era una belleza vulgar, sino una combinación de cuerpo y espíritu que se paseaba disfrazada de “Inglesa en el extranjero”. Evocaba pureza y luz. Según el pintor siempre estuvo enamorada de él, un corpulento muchacho que cuando llegó a Madrid con 20 años, medía 1,80 metros y pesaba 120 kilos. | | | | Aurelia Gutiérrez-Cueto Blanchard (Santander, 1877 - Valladolid, 1936) |
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Ramón Gómez de la Serna en 1915 organiza la exposición de los “Pintores íntegros”, en el salón de los hermanos Kühn (Galería de Arte Moderno) de la calle del Carmen, desde el 5 al 15 de marzo, donde por primera vez aparece el “cubismo” en España y en cuyo catálogo se dice de María Blanchard: viajera que acaba de llegar de vuelta del país de las obscuras cavernas y del país de las cumbres radiantes. También que: ella no es femenina, es varonilmente maligna, lo que no le agradó mucho.
La Exposición desata una inusitada polémica, que hace comentar al crítico José Francés: No obstante, en nombre de los cuadros admirables de antes, yo me permitiría rogar a la señorita Gutiérrez-Cueto y al señor Rivera, que olvidaran, en lo sucesivo, estos cuadros de ahora…
Otra crítica que reciben es que: Los cuadros de la señorita Gutiérrez y del señor Rivera son cubistas y el desconocimiento se apodera del espectador a la vista de esas producciones de esa extraña escuela nueva, que ha dislocado reglas y preceptos, y en su anarquía llega hasta los límites del delirio pictórico.
En “La Esfera” la crítica es: La señorita Gutiérrez cuando quiere dibujar dibuja admirablemente, según puede apreciarse en su repugnante cuadro titulado “Madrid”. También se tituló “Venus de Madrid”, hoy desaparecida.
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Exposición de los “Pintores íntegros”. Heraldo de Madrid 8 de marzo de 1915, foto Alfonso |
El cubismo de María Blanchard de antes de la guerra se suele comparar con el de Diego Rivera y ambos fracasan rotundamente. María, a la citada Exposición presentó 6 obras: “Academias”, del que se dice: conjunto de cubos de colores chillones, amarillos como limones, rojos como sangre, azules, etc. Y no se ve más. “Naturaleza muerta nº 1”. “Naturaleza muerta nº 2”. “Figura en movimiento”, de 1912, en cueros una señora horrible, con roña en los pies y manos y una cadera dislocada. Se convirtió posteriormente en “Nu” o “Eva” y se encuentra en el Museo de Arte Moderno Villa de París. “Cabeza sobre fondo blanco”. “Cabeza sobre fondo verde” y “Madrid”, una mujer desnuda y a los lados unas cosas chillonas de color, inexplicables, insultantes, agresiones a la vista. Participaron también: Agustín Choco, escultor y Luis Bagaría, destacado caricaturista, que en el “Mundo Gráfico” publica una de María y Rivera juntos, el 17 de marzo de 1915. Hay otra caricatura de la pareja original de Fernando Fresno en la misma revista y el mismo día.
De María Blanchard su amigo del alma Diego Rivera afirma: Era jorobada y alzaba poco más de 4 pies del suelo. Por encima de su cuerpo deforme había una hermosa cabeza. Sus manos eran también, las más bellas manos que yo jamás haya visto.
A través de la figura de Rivera se compara a María Blanchard con Frida Kahlo (con la que Diego se casó en 1929 y 1940), también deforme por un accidente y enferma, porque asume su dolor más allá de la pintura y María queda el suyo en el interior y lo transmite a través de su obra. Como a María tuvieron que adaptarle el caballete a la cama porque el corsé de yeso le impedía sentarse. Se habla de que Diego Rivera fue el amor de María Blanchard, sin correspondencia.
ESTANCIA EN SALAMANCA
Respecto a los deseos de su hermana le hace caso y presenta la documentación para las Oposiciones a Escuelas Normales.
Isabelle Rivière, la primera biógrafa de María Blanchard y su discípula en París, que había escrito sobre ella: “Pájaro salvaje encerrado en una triple jaula: su cuerpo torturado, su corazón ávido y el mundo hostil”, nos dice: La familia quería un trabajo para ella. Por eso estuvo de acuerdo en hacerse profesora de dibujo y obtuvo plaza en las Escuelas Normales del Magisterio de Salamanca. Pero allí no fue bien acogida, renunció y regresó a París a pesar de la incertidumbre.
La condesa de Campo Alange en su biografía de María Blanchard, afirma: Todos la recomendamos y obtuvo en abierto concurso la cátedra. Se puso radiante y se veía que ensayaba frente a un espejo de luna para ejercer su cargo de maestra. Se volvió más menuda, se echó más hacia delante y su rincón del café parecía mirar a los mármoles como si mirase ya los dibujos de sus alumnos. Volvió a España para desempeñar una plaza de profesora de dibujo en la Escuela Normal de Salamanca. Se produce un choque con la enseñanza tradicional que para ella no representa el arte. Renuncia finalmente a su puesto y vuelve con sus lienzos a París.… Abandona o la hacen abandonar su puesto y María Blanchard queda de nuevo sola, frente a frente a su arte…
Esther López Sobrado en su tesis doctoral sobre los artistas cántabros en París, dice: Seguramente ayudada por su familia, que deseaba que la joven tuviera alumnos con sueldo seguro y fijo, que le permitiera asegurar su futuro, consigue una cátedra de dibujo en la Escuela Normal de Maestros de Salamanca ese mismo año de 1915… Resultó esta estancia de un curso académico en Salamanca tan dolorosa para la artista que tomó la firme resolución de abandonar España, para no volver jamás.
Otro tanto escriben infinidad de escritores biógrafos:
Esto [fracaso en la Exposición de Pintores Íntegros] junto con la precaria situación económica por la que atraviesa su familia, decide opositar para la cátedra de Dibujo de la Escuela Normal de Salamanca y lo consigue. Sin embargo, su presencia en esa ciudad es corta, ya que sus alumnos no paran de hacer comentarios crueles sobre su aspecto físico.
Laura Brasstein Martín.
Se presentó y consiguió la cátedra de dibujo de la Escuela Normal de Salamanca.
Concha Mayordomo.
Consigue una plaza de profesora de dibujo en la Escuela Normal de Salamanca.
María Inmaculada Alcalá García. (Tesis).
Animada por su familia consigue una cátedra de dibujo en la Escuela Normal de Salamanca ese mismo año de 1915.
Real Academia de la Historia.
Cuando fue profesora una vez conseguida la Cátedra de dibujo en la Escuela Normal de Salamanca y se ganaba la vida dando clases.
Olga Cabrinety.
Por esta misma época le conceden en Madrid una medalla de plata y la cátedra de dibujo en la Escuela Normal de Salamanca, pero poco tiempo durará en su cargo.
Pilar Camón Álvarez.
Se planteó prepararse para unas oposiciones al cuerpo de profesores de dibujo y en 1915, aprobó y obtuvo una plaza en la Escuela Normal de Maestros de Salamanca.
Carmen Calvo Novell.
Unas ganadas oposiciones a cátedra de dibujo la llevan a la Escuela Normal de Salamanca.
Manuel Arce.
Como se habían terminado sus bienes, se hizo profesora de dibujo y obtuvo plaza en las Escuelas Normales de Magisterio de Salamanca.
Nale Ontiveros.
Decide opositar y consigue Cátedra de dibujo artístico de la Escuela Normal de Salamanca en el año 1915.
Paloma Palacios.
Después de aprobar unas oposiciones a Cátedras de dibujo para sus Escuelas Normales se traslada a Salamanca, donde obtiene plaza.
Isabel Caballero, Gloria Perna y Ana Vales Fidalgo.
Pero las necesidades económicas hicieron que María se presentara a unas oposiciones a la cátedra de dibujo de la Escuela Normal de Salamanca. Las ganó y se trasladó a esta ciudad durante un curso.
Joaquín de la Santa Cinta.
En la Exposición de la Escuela de san Eloy de 2002 sobre “El dibujo en el siglo XX”, Ricardo López escribe: El dibujo magnífico de esa joven profesora, sensible y contrahecha de la Normal de Salamanca, a quien la crueldad de los alumnos obligó a huir a París: María Blanchard.
Nunca fue profesora de dibujo en la Normal de Maestros salmantina, pues hasta el BOE de 19 de noviembre de 1915 no se publica la resolución con los admitidos a la prueba y los excluidos por diversos motivos, entre los que está María Gutiérrez Blanchard, “por falta de legalización del Acta de Nacimiento”, figurando en la página 432, dándose un plazo para la subsanación de defectos y la subsiguiente publicación. El Tribunal que ha de juzgar las oposiciones se nombra en el BOE del 15 de noviembre 1915, y lo componen: Presidente, el exministro Carlos Gloizard y Vocales, José Esteban Lozano, José Blanco, Arturo Somoza y Juan Antonio Bullón.
Subsanados los defectos tendrían que publicarse los admitidos en el BOE, lo que llevaría otro tiempo y celebrados los exámenes, el resultado habría de publicarse también con lo que es imposible su presentación personal si ya se encuentra en Francia, como se demuestra con una carta fechada en París el 6 de marzo de 1916, dirigida a su nuevo marchante el célebre Lèonce Rosenberg, que dice: Sobre mi trabajo le diré que su cuadro estará acabado para su llegada y también otro más en el que trabajo al mismo tiempo. Espero que los encuentre Vd. de su agrado. Como siempre trabajo tan lentamente que me da vergüenza que en cuatro meses no haya hecho más que dos cuadros. Es verdad que son cosas pequeñas.
Lo que no cabe duda es su presencia en Salamanca porque el 6 de diciembre de 1915 publica El Adelanto: Han sido nombradas profesoras especiales de dibujo de las escuelas de adultas de esta capital, doña Adoración Mazaleda Pinero [sic] (es Moraleda Piñero) y doña María Gutiérrez Blanchard. Lo que no se aclara es de qué escuela de adultas se trata pues en ese año existen en Salamanca las siguientes: Normal de Maestras en La Merced a cargo de la Regente, doña Natividad Calvo y doña Perfecta Corselas. De la Alamedilla, regida por doña Dolores Garrote y doña Adelina Guisasola, que inicia el curso con 47 alumnas. De la calle de Sorias, por la Directora doña Melchora Bermejo y doña Isabel González y del Ateneo Salmantino, en la Plaza de Colón, cuya Directora es doña Isabel Herrero. Suponemos que sea ésta la escuela de adultas porque, unos días antes, el 9 de noviembre, se abre el curso académico con 34 alumnas y la Directora, en declaraciones a la prensa el día 16 afirma que enseguida se nombrarán las profesoras de dibujo y corte y confección, habiendo terminado ya las oposiciones de dibujo y las otras terminarán muy pronto. María Blanchard se conoce que ante la tardanza en la convocatoria de los exámenes en la Normal opta provisionalmente por concursar a la Escuela de Adultas. María José Salazar afirma en su tesis sobre María Blanchard que en 1915 manda carta con méritos y obtiene la plaza pero no especifica a quién dirige la carta, ni dónde obtiene la plaza. (Es de suponer que fuera al Ateneo salmantino pues a la convocatoria de profesor especial de dibujo en Escuelas Normales lo que había de enviarse era una documentación tasada).
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Plaza de Colón con el edificio del Ateneo Salmantino. Tarjeta postal de Photoglob Zürich |
Doña Adoración Moraleda ni siquiera se ha presentado a la oposición de profesoras de Normal, aunque algún periódico salmantino, el 16 de enero de 1916, le atribuya esta titulación a su regreso de Madrid. La exposición de trabajos de las alumnas del Ateneo, en enero de 1916, es presentado por las profesoras María Herrero, Adoración Moraleda y la auxiliar Angela de la Lluvia. Nada se dice de María Gutiérrez Blanchard. Pasados los años, el 31 de enero de 1934 es sustituida, por imposibilidad física, la profesora especial de dibujo de las Escuelas de Adultos de Salamanca doña Adoración Moraleda.
En otra carta de su hermana Aurelia, en el Archivo General de la Administración de Madrid, legajo 5300/2, 1916, renuncia en nombre de María Blanchard, como profesora de dibujo en Salamanca, pero no hemos accedido al original con lo que no sabemos a quien la dirige.
La única autora que acierta en sus afirmaciones es Nuria Rodríguez Calatayud al decir: Aprobó una plaza de maestra de dibujo en Salamanca, que tuvo que abandonar debido a las injustas bromas que recibía de alumnos y compañeros.
Durante su estancia en Salamanca los dos cuadros que pinta y que no identifica en su escrito de 6 de marzo a su marchante Rosemberg, son: “Femme avec guitarre”, hoy en el Museo Reina Sofía y “Naturaleza muerta roja con lámpara”, con influencia de Cezanne, que poseyó toda su vida y pasó a su hermana Carmen, quien sufre el 1 de octubre de 1978 el robo en su vivienda de Madrid, calle de Granada 28, de 5 cuadros entre los que se supone estaría el citado y que hoy se encuentra en la colección particular LL-A.
El paso de María Blanchard por Salamanca es muy fugaz, calculándose en cuatro meses, desde el inicio del curso en octubre, pues como se ha justificado antes, a primeros de marzo de 1916 ya se encuentra de nuevo en París. No ha podido resistir el san Benito que lleva a cuestas desde su nacimiento y continúa siendo “la Bruja”, que le gritan los chicuelos y la constante repulsa de los mayores por su acentuada joroba, producto de escoliosis con doble desviación de columna, su menguada estatura de 130 cm, su visible cojera, las grandes antiparras con cristales rotos y patillas sujetas con alambre negro y su raída vestimenta mil veces usada.
Dice Isabel Rivière: Llevó durante años y años un vestido horrible de enormes cuadros amarillos y verdes del que no logramos que se deshiciera ni con las artimañas más sutiles, ni con los ataques más directos... Cuando intentábamos insinuar, sin concederle mayor importancia, que verdaderamente el negro era lo que mejor le sentaba, contestaba con una sonrisa suplicante y zalamera de niño al que quisieran quitar un caramelo. “¡Me gusta tanto arreglarme!”. Es la rechifla de sus alumnas, su talante derrotista se demuestra en que le parece criminal obligar a sus discípulas a copiar láminas ridículas sin el menor interés artístico. Discusiones interminables, sufrimientos sin límites, humillaciones… y para remate, mezquino entendimiento con la Directora. Su sufrimiento físico se demuestra en que desde que nació no puede dormir en cama normal y tiene que hacerlo en un sillón, recostada siempre del mismo lado, como lo pone de manifiesto en su cuadro, pastel sobre cartón de 1925, “La convalescente”. Ramón Gómez de la Serna en su Automoribundia I, dice: Pasó una temporada en la provincia pero pronto supimos que María había renunciado al cargo después de un curso académico lleno de humillaciones… ¿Qué había pasado? En la ciudad pura y llena de luz cumbral se había destacado María como una bruja simbólica para los niños que la seguían y la gritaban por las calles. | | | | Isabelle Rivière (La Chapelle- -d’Angillon, 1889-Dourgne 1971) |
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En cierta ocasión usa el mantón de Manila para disimular la joroba, se despoja de las gafas y mirándose al espejo musita: Cambiaría toda mi obra por un poco de belleza. Su prima Josefina de la Serna nos dice, sobre el particular: Tan amante de la belleza, sufría con su deformidad hasta un grado impresionante.
La tal deformidad se viene repitiendo que fue a consecuencia del resbalón que sufrió su madre embarazada al intentar subir a un carruaje. Es lo cierto que la cifoescoliosis, doble desviación de columna con curvatura posterior y lateral que padeció, es una enfermedad congénita, producida por una alteración cromosómica y la misma que sufrió su prima Mercedes Blanchard y Plasencia, fallecida soltera y sin hijos en 1960, lo que indica que la lesión era hereditaria por la parte de los Blanchard.
REGRESO A PARIS
A tal extremo llegó su sentimiento que, a partir de 1915, prescinde del apellido Gutiérrez y llega a decir a sus amistades parisinas, según escribe Liliane Caffin Madaule: Si vais a España escupid sobre la tierra de España, y al regresar no olvidéis limpiar el polvo de vuestros zapatos.
De vuelta a París se reúne con los otros artistas en el café “La Rotonde”, regentada por “Le père Libion” e inicia una actividad frenética pintando 17 composiciones cubistas, otros 8 bodegones del mismo estilo y 18 naturalezas muertas, aparte de otros cuadros y con el producto de las ventas compra un estudio en la calle du Maine. De esa primera época son: “El molinillo de café”, “Bodegón de frutas y botella” y Composición cubista”.
Fueron célebres las broncas entre el gran admirador de María y feroz crítico de su pintura el ruso Chevalavsky y Diego Rivera, a quienes la Blanchard echaba de casa a cajas destempladas, pero los admitía al día siguiente.
En 1916 llega a París procedente de Méjico su primo el escultor Germán Gutiérrez Vidal a quien presenta en los círculos vanguardistas con los que convive hasta su regreso a Méjico el año siguiente.
Picasso en esta época trata, en vano, de infundir en María sentido comercial a la hora de vender sus cuadros. Abundan en esta idea sus compañeros de “La Rotonde” que dicen de ella: Pobre María, se cree que solo con talento tendrá éxito.
| Pablo Ruiz Picasso (Málaga, 1881–Mougins, 1973) |
| | | | Paul Rosenberg (París, 1881 - Neuilly-sur-Seine, 1959) |
| | | | Léonce Rosenberg (París, 1879 - Neuilly-sur Seine, 1947) |
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Siguió retocando “La Comulgante”, iniciado en 1914 y que no concluirá hasta 1920, presentándolo con total éxito a la Exposición de Bruselas junto a Picasso, Leger y Braque. Le ofrecen un cheque en blanco por el cuadro pero prefiere el mecenazgo permanente del marchante Léonce Rosemberg con el que mantuvo contrato entre 1916 y 1920, percibiendo una cantidad de 450 francos y en su galería L´Effort Modern de la rue Baume, realiza la primera exposición individual en 1919. Llevaba este marchante a Jacques Lipchitz, Henrri Laurens, Fernand Léger, Gino Severini, Auguste Herbin, Diego Rivera, del que se deshizo pronto y alguno más, Paul Dermée o Pierre Reverdy, protegiendo sobremanera a Juan Gris y dando primacía a los falsos cuadros de éste y a los de Picasso y Braques.
Por carta de 24 de febrero de 1920 Rosemberg: rompo el acuerdo ya que es imposible continuar comprándole eternamente toda su producción. Es por lo que debo hoy aconsejarle que busque salidas para su pintura, que no compraré en el futuro más que conforme a mis ventas. Anuncia que le compraré su producción hasta el 15 de de julio próximo.
En 1921 va a presentar tres cuadros cubistas en el Salón des Independents: “Nature morte”, “Nature morte” y L´enfant au cerceau” y uno figurativo, “Nature morte aux bananas” que da comienzo a una nueva etapa en su producción artística y que es lo que produce la ruptura con Rosemberg, que no la entendió nunca y que no pudo, o no quiso vender bien sus cuadros, deshaciéndose de toda su obra, vendiéndola a un precio menor que el valor real.
El hermano Paul Rosemberg le compra “La Comulgante” y le ofrece su galería en la rue Boétie.
Al año siguiente presenta: “La femme au chaudron” y “La femme au panier” y posteriormente: “Portrait”, “Portrait”, “Femme assis” y “La buveur” (el Borracho).
En 1918 y durante su estancia en Beaulieu-près-Loches, huyendo de los bombardeos de París, nace el “cubismo de cristal” de la mano de María, Gleizes y Metzinger.
Dice de ella Concepción de Diego San Emeterio: En esta etapa cubista no llegó a una total descomposición de la forma, se limitó a tallarla en planos esquemáticos que prestaban a sus composiciones un gran rigor pero también una fluidez no incompatible con una preciosa captación de la realidad.
ÚLTIMOS TIEMPOS
La asociación “Ceux de Demain” formada, por André Lhote, los belgas Jean Delgouffler y Jean Grimard y el coleccionista danés Frenk Flausch firman con María contrato a cambio de una mensualidad y ella les vende su producción de oleos y telas. “La femme au perroquet” ya es para esta asociación. Expone 23 obras en la galería “Centauro” de Bruselas en 1923, en el Salón de las Tullerías en 1924 y luego otra vez en Bruselas en 1926 con 27 obras. Entre 1923 y 1931 parte de su producción se vende a Bruselas y Amberes. De Grimard se distancia por la exigencia que le hace de “Las dos hermanas”, cuando tiene un amor especial por este cuadro hasta el punto de haberlo recobrado tras su venta.
En los últimos años de la artista se hacen cargo de ella el doctor Girardin, propietario de la galería “La Licorne” y Max Berger, director de la Galería de la calle Valvin parisina, que nadie sabe que tiene contrato y no solamente algunos cuadros. En 1930 viaja a Bruselas y posteriormente a Londres.
| César Jenaro Abín (Cabezón de la Sal, Cantabria 1892 -Santander, Cantabria 1974) |
| | | | Maurice Girardin (París, 1884 – París, 1951) retrato de Pierre Bonnard de 1917 |
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| Germán Cueto, Lola Cueto, Consuelo Cueto, hermana menor de Germán, y las hijas de la pareja Ana María y Mireya. México, ca. 1927. Foto www.germancueto.com |
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César Jenaro Abín llegó a París en 1924 y le ayudó su antigua profesora María Blanchard, presentándole a la flor y nata de los artistas parisinos, a los que caricaturizó con un estilo inigualable, convirtiéndose en dibujante de infinidad de publicaciones. A María Blanchard le hizo una excelente caricatura en 1932, año de su fallecimiento.
Llega a París de nuevo en 1927 y se instala con ella su primo criollo el escultor y creador de títeres Delfín Germán Salvador Apolonio Gutiérrez Cueto y Vidal “Germán Gutiérrez Vidal”, hijo del hermano de su padre Javier, junto a su esposa, elaboradora y diseñadora de tapices, la mejicana María Dolores Velázquez Rivas “Lola Cueto” y sus dos hijas pequeñas, Ana María, de 7 años y Mireya, de 5, que le sirven de modelo en varios cuadros. (En 1924 habían sido vecinos de Diego Rivera y Lupe Marín en Méjico). También llega su hermana Carmen con su marido y sus dos hijos, la visita su hermana Aurelia y en 1929 Ana, casada con el diplomático Juan de Dios Egea y sus tres hijos. Acuciada por los gastos de tanta familia tuvo que empeñar los objetos de plata y cuando le proponen que venga también su madre, ajenas al problema económico, María se niega.
Educada en un hogar agnóstico, tanto en lo religioso como en lo político, durante toda su vida fue rebelde y en un acceso místico se acuerda de la religión en 1927, frecuentando las misas diarias que puede pese a sus dificultades al caminar, escuchando ansiosa los sermones, donando fondos al orfelinato e incluso pensando en abandonar todo, pintura, familia, amigos, legar sus cuadros y bienes a los asilos e ingresar en un convento, siendo su confesor el benedictino padre Alterman, quien consigue bajarla a la realidad y le aconseja cordura diciéndole: que deje de discutir día y noche con María Blanchard… Pero hable a menudo con Dios… La llegan a tachar de “chinche de sacristía”.
Su delirio místico se produce por la confluencia en el tiempo de varios factores: el abandono de Diego Rivera de su primera esposa Angelina Beloff, huyendo a Méjico en 1922 y casándose ese mismo año con Guadalupe Marín, la conversión al catolicismo de G. K. Chestertón en ese mismo año, de Gino Severini en 1924, de Jean Cocteau y Pierre Reverdy en 1926, también la de su amigo y patrocinador, el protestante Frenk Flausch, que fallece en 1926, la muerte de su amigo Juan Gris en 1927 y la entrada en un convento de ursulinas de su discípula Jacqueline, hija de su íntima amiga Isabelle Rivière muy poco antes.
Si vivo voy a pintar muchas flores fueron sus últimas palabras. Ciertamente este deseo se ajustaba a la realidad pues no las había pintado en su vida. La familia de María retiró su producción que estaba en plena pujanza, dando lugar a que a partir de su muerte la obra fuera silenciada ocultando su figura y se llegue a borrar la firma de sus cuadros para venderlos como de Juan Gris.
| La tumba de Maria Blanchard en el Cimetière Parisien, Bagneux. Fotografía de Androom (03 de noviembre de 2017) |
| | | Fallece el 5 de abril de 1932, se dice que de tuberculosis, cosa que desmiente Consuelo Bergés que había estado comiendo con ella 6 meses antes de su fallecimiento y al cementerio de Bagneux acuden unos pocos amigos, Francisco Pompey, André Lhote, el famoso pintor y destacado dibujante y caricaturista César Jenaro Abin, primer discípulo que tuvo María Blanchard en Cabezón de la Sal, Angelina Beloff, pintora rusa primera esposa de Diego Rivera, Isabelle Rivière, parte de sus familiares y muchos pordioseros, vagabundos, tullidos y desharrapados a los que acompañó y ayudó en vida, hasta el punto de malvender sus cuadros para socorrer alguna necesidad. El grupo de mendigos la denominaba “La angelical jorobada”. Es enterrada bajo el signo de la cruz y en la lápida figura como leyenda: María González-Cueto Blanchard. Santander. 6-3-1881. París 5-4-1932. Pasados los años y al no estar atendidas las obligaciones económicas de su tumba, el cadáver estuvo punto de ir a la fosa común a no ser por la intervención del alcalde de Santander don Juan Hormaechea, que por iniciativa del concejal Fernando Baños, consiguió fuera enterrada dignamente en la división 88, fila quinta, segunda tumba, pues la parte de sus familiares paternos no quisieron que fuera trasladada al Panteón de Personas Ilustres de Santander, con lo que cumplían los deseos expresados por María que no quiso que sus huesos reposaran nunca en su patria, que le había negado el derecho a ser feliz. |
La familia materna jamás se hubiera opuesto a su traslado, pese a que siempre mantuvo con su madre una fría distancia, quizá por la creencia de que no había intentado cuidarla. De ella decía que era una mujer fantasiosa que tendida en el lecho, sacaba uvas, peras y gorriones de debajo de la almohada.
El 1 de junio de 1932 patrocinada por la Unión Republicana Femenina se celebra una velada en el Ateneo de Madrid reuniéndose un grupo capitaneado por Clara Campoamor, Ramón Gómez de la Serna, Concha Espina y Federico García Lorca para rendirle homenaje y recuerdo, pues era la gran desconocida. Lorca leyó su célebre “Elegía a María Blanchard”.
Su obra se empieza a conocer a partir de 1937 en la Exposición del “Jeu de Paunne” con 12 pinturas. Eugenio D´Ors la selecciona para el “Salón de los Once” de 1940 y luego en los 70.
En octubre de 1978 roban 5 cuadros en casa de su hermana Carmen en Madrid, calle de Granada, 28.
Ese mismo año el Ayuntamiento de Santander adquiere un cuadro por 3 millones de pesetas y en el año del Centenario del nacimiento adquiere otro. En el Museo de la ciudad se encuentra la primera obra de María Blanchard, de 1909, que fue un obsequio de la pintora.
Al empezar a conocerse su obra, la desgracia la persigue hasta después de muerta, pues la Exposición efectuada en 1982 es eclipsada por otra de Picasso y en 2013 en el Museo Reina Sofía se celebra otra que también coincide, dos meses más tarde, con la de Salvador Dalí.
En 1998 y en la autopista A-7, cerca de Figueras roban varias obras: Joven en la Peluquería de 1925, Maternidad de 1925, La toilette de 1928 y Dolor de Muelas.
Retratos y caricaturas de María Blanchard
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Muy joven, cara redondeada, un poco de perfil, sin gafas ni flequillo, con rebeca y blusa blanca. (s.d.)
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De frente en sus primeros años, con flequillo, gafas redondas y ropa invernal.. (s.d.)
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Con Jacqueline Rivière, frente al piano, hecha por Marc Vaux en el estudio de la calle Boulard en 1909. (s.d.)
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Tora Vega Holmström 1921. Maria Blanchard óleo sobre lienzo 40 x 30 cm.. (s.d.)
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