Cristo de Marfil en la Clausura del Convento de los Pp. Dominicos

 

 

Se trata de un Cristo hispano-filipino de 60 x 53 cm cuya cruz tiene por medidas 116 x 66 cm, datado en el siglo XVII1. 

De expresión dolorida y finas facciones alargadas, cabello, bigote, barba, cejas y ojos policromados, con manchas sanguinolentas en frente manos y rodillas. 

Corona de espinas grande de rama gruesa sin apenas punzantes, cejas grandes delineadas y finas, párpado superior de líneas curvas paralelas, grandes pupilas de acusado iris, nariz grande y larga con aletas pronunciadas, boca entreabierta apreciándose los dientes, labio superior fino e inferior grueso, bigote lineal grande con mostacho dibujado en líneas paralelas ligeramente onduladas, barba abierta en dos con rizos simétricos, no muy tupida ni grande, cuello largo, melena dibujada en rizadas guedejas que caen sobre los hombros. 

La Cruz es de madera de troncos rectos y adornos sueltos de flores con muchos pétalos y hojas carnosas. 

Parece tratarse de uno de los dos Cristos que el fundador del Oratorio del antiguo Noviciado, fray Antonio de Sotomayor, donó entre las alhajas de las que hizo inventario en 1632 y que figura como "un Cristo crucificado vivo de marfil en una cruz de ébano que a su Señoría dio el duque de Lerma y es excelentísimo"2. Pudiera tratarse del Cristo que hemos descrito por la coincidencia de fechas, por la disposición viva del Cristo y solamente difiere en que la cruz no es de ébano sino de madera. 

Parece ejecutado en el mismo taller en que se esculpió el Cristo que se ha descrito en la sacristía del convento, aunque éste tiene una mejor calidad. 

 

 

 

 

1.- Margarita M. Estella Marcos, La escultura barroca de marfil en España. Escuelas europeas y coloniales. (2 volúmenes) tomo II. Madrid, 1984. Pg. 138.

2.- Alfonso Rodríguez G. de Ceballos, La iglesia y el convento de San Esteban de Salamanca. Salamanca, 1987. Págs. 105-107.

 

Por José María Hernández Pérez
06/03/2023 Rev. 00