En París, desde 1891 se celebraba con motivo de los Carnavales la elección de una Reina de belleza (Reine des Reines de la Mi-Carême) entre las trabajadoras de los mercados parisinos, aunque en los primeros tiempos solamente podían concursar las lavanderas y antes todavía las pescaderas. Con el tiempo se abrió la puerta para que no solo fueran las concursantes francesas, sino que se admitieron de otros países, lo que dio lugar a concursos de belleza en cada nación.
El 24 de febrero de 1906 el Comité de Fiestas de París cursó invitaciones a Roma, Lisboa y Madrid para que eligieran las respectivas Reinas que serían agasajadas en París como representantes de la unión comercial que se pretendía entre las Naciones Latinas.
De la organización del concurso en España se encargó la revista Blanco y Negro, quien redactó las bases por las que se habría de regir y que fundamentalmente eran que las concursantes debían ser solteras, entre 18 y 25 años, de intachable conducta y pertenecer al comercio del los gremios de la alimentación de Madrid o sus similares. Todos los viajes de ida y vuelta y estancia en París durante los 6 días de fiestas, del 20 al 25 de marzo, serían abonados por el Comité de Fiestas de París y todos los demás gastos necesarios por el Hispano-Francés de Madrid y la empresa de Blanco y Negro y ABC. Igualmente le serían abonados para el equipo y demás gastos que necesitaran hacer, mil pesetas a cada una y se abonarían los gastos a un individuo de su familia.
Palacio de Blanco y Negro y ABC, construido con diseño del arquitecto D. José López Sallaberry en 1894. |
La Reina de Madrid, Concepcion Ledesma, en el medio, y sus dos damas de honor, Luisa Mungira y Matilde Gomez. L'Illustration, N°3290, 17 marzo 1906 |
Conchita Ledesma por las calles de París |
En el desfile por las calles de París se presenta una cabalgata de 17 bellísimas y adornadas carrozas, yendo Conchita y sus Damas de honor en el grupo tercero del cortejo en el “Carro de los Navegantes”, junto a las Reinas de Roma, María Speroni y Lisboa, Valentina Torrea, que componían el trío de la Alianza Latina.
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Carroza de las Reinas de la Alianza Latina (Roma, Madrid y Lisboa) |
Las Reinas de Roma, Ginebra (¿Lisboa?) y Madrid con sus Damas de honor en el banquete celebrado después de la Cabalgata. Conchita luce mantilla blanca de blonda y flores en el pecho y Matilde y Luisa van adornadas con los vistosos vestidos de valenciana y charra. Fotografía de ABC por Valerian Gribayedof |
Vista del interior del Teatro Lara, con la reina madrileña de la «Mi carême» y sus damas de Honor el 4 de abril de 1906. Fotografía de ABC por Christian Franzen |
Conchita había nacido en Madrid en fecha indeterminada, aunque su amigo y crítico Álvaro de Retana Ramírez de Arellano afirma que en 1877, cosa imposible si tenemos en cuenta las condiciones del Concurso que exige edad entre 18 y 25 años, por lo que su nacimiento tendría que ser entre los años 1881 y 1888. En realidad parece que su nacimiento se produjo en 1887. Fueron sus padres, que vivían en la calle de Panaderos, Mariano Ledesma, picador y rejoneador y una dama salmantina, muy religiosa y algo severa, a la que había conocido como consecuencia de sus largas estancias invernales en Salamanca, requerido para las faenas de tienta por los ganaderos del campo charro. El Adelanto del 5 de diciembre de 1908 la hace oriunda de Los Villares, donde en ese momento mantiene abundante familia.
La Dama de honor, Luisa Munguira, según relata El Adelanto el día 5 de diciembre de 1908, en su sección “Figuras del cine” que firma Ruperto, también era hija de una dama salmantina, pero no nos da más precisiones. Además, para corroborar tal hecho, está su aparición en París ataviada con traje de charra. Indagando por nuestra cuenta suponemos que tendría relación familiar con Elpidio Munguira Santamaría, funcionario de Hacienda y conocido hostelero, pero no podemos garantizar su paternidad ni tampoco, aunque esta sea probable, la de alguno de sus hermanos de Madrid o Burgos.
D. Elpidio Munguira Santamaría, industrial muy conocido en Salamanca, que figura como socio en la Cámara de Comercio desde el 2 de julio de 1910, siendo el propietario de un café en la plazuela de la Libertad denominado “El Salmantino”, que ofrece sesiones de música en grabaciones de disco. Abre una sucursal de su establecimiento, que llama ”El Sanatorio”, en el Arrabal. Llega a Salamanca en 1895 como funcionario de Hacienda y está vinculado con la Casa de Burgos salmantina y gestiona la venida de célebre Orfeón para dar un concierto en el Liceo el 13 de setiembre por la mañana y otro por la noche en la Plaza Mayor, dirigido por el maestro José Joaquín Artola. La procedencia burgalesa de Elpidio se acredita, además, por el hecho de que su hermana Elvira es nombrada, por el ayuntamiento de Burgos, maestra interina de la escuela de párvulos de La Calera, recién salida de la Normal, para pasar a Madrid en 1888, donde consigue la plaza en propiedad.
El padre de Conchita, Mariano Ledesma “Morenito” nació hacia 1860 en Madrid, fue picador en las cuadrillas de Juan Ruiz “Lagartijo”, Fernando Gómez “El Gallo”, Joaquín Sanz “Punteret y Juan Jiménez “El Ecijano”, debutando en Madrid el 24 de junio de 1883. Los días 7 y 8 de noviembre de 1893 y en corrida organizada por el Dispensario de Alfonso XIII debutó como rejoneador, junto a José Rodríguez “Tabardillo” y al año siguiente hizo su presentación en Barcelona alternando con el rejoneador portugués Alfredo Tinoco da Silva.
El 29 de junio de 1900 le cupo el honor de inaugurar la plaza de las Arenas de Barcelona en una corrida de 8 toros de la ganadería del duque de Veragua, siendo los dos primeros, llamados “Jocinero” y “Querencioso” rejoneados por Mariano y por Isidro Grané y los seis restantes, en lidia normal, por los diestros Luis Mazzantini, “Conejito” y Antonio Montes, que sustituye a “El Algabeño”, por cogida de éste.
Dos imágenes de Mariano Ledesma vestido "a la Federica", rememorando los atavíos del siglo XVIII |
Falleció el día 3 de octubre de 1918 cuando se encontraba paseando por la Red de san Luis en Madrid, al caer fulminado al suelo. Varios transeúntes lo transportaron en un coche hasta la próxima Casa de Socorro, pero ingresó cadáver.
Conchita destacaba por su altura y esbeltez, de ojos grandes y negros y debido a su excelente fotogenia, durante muchos años fue considerada la Reina de las tarjetas postales, ya que fue la fotografía más vendida. De ella se dijo que era guapa, joven, simpática, con ganas de divertirse y triunfar, un poco alocada, un poco ambiciosa, un poco ingenua y un poco deslumbrada por el brillo de las joyas bajo la luz de los focos.
Dos tarjetas postales de Conchita Ledesma. http://www.memoriademadrid.es/ |
En el teatro Popular de Málaga se encuentra actuando los días 15, 23 y 25 de octubre de 1908, destacando con su couplé “Amor de muñecos” de Juan Martínez Abades, José Remón Vallejo y Aurelio González, que también constituyó un gran éxito para Pepita Ramos, “La Goyita” y Concha Piquer. Es acompañada a la guitarra por Adela Cubas en la ejecución de un tango. Por estas fechas constituyó noticia nacional su paseo en globo y el hecho de cambiar los uniformes de los cocheros madrileños dio lugar a la aparición de una coplilla que decía:
Solo sé que con los trapos seremos la crema mesma y que estaremos más guapos que la Conchita Ledesma |
Cuando llega a Salamanca el periódico El Adelanto le dedica una de sus habituales “Quisicosas”:
Nuestra galería histórica de figuras salmantinas se ha aumentado de un porrazo con una persona inédita. Y aquí donde se les rinde veneración sacratísima a matemáticos célebres, a famosos humanistas, a inolvidables teólogos, a poetas de gran valía, a religiosos preclaros, a laureados artistas, de hoy más un lugar haciendo entre la brillante fila colocaremos por obra de su gracia bonitísima a la que según nos dicen es toda una salmantina: la gentil Concha Ledesma renombrada cupletista. De tan excelente hallazgo debemos de dar albricias pues la gallarda persona de la vedette aplaudida viene a llenar un vacío que a la verdad se sentía, y rompe el árido campo de la interminable lista de tantos doctos varones de faz macilenta y lívida con un nota graciosa de novedad femenina. Bien viene, pues, a sus lares la encantadora Conchita que da a la prosaica historia de esta nuestra patria chica con el fru fru de sus faldas aire de adorada vida. Y ya que en nuestros anales hay una dama María la Brava, fuerte y hombruna, que hizo de los hombres víctimas colocando las cabezas en la punta de sus picas, no imite el triste episodio, magüer que a querer la artista las flechas de sus pestañas llegan hasta el alma misma. |
A su marcha se especuló con que se había enamorado perdidamente de ella un acaudalado joven salmantino y que era correspondido. Sobre la vida privada, muy celosa de su intimidad a lo largo de los años, no hubo noticia alguna.
No reaparece hasta noviembre de 1909 actuando en el teatro Lírico de Palma de Mallorca, pasando en diciembre al teatro Novedades de Valencia. El 27 de diciembre de 1909 actúa en el hoy Variedades, ayer Palacio de la Ilusión de Jitiván, la citada guitarrista Adela Cubas que acompaña a la cantaora Pilar García.
En la Semana Santa de 1910 Conchita Ledesma, actúa en el teatro Novedades de Valencia dando lugar a un escándalo monumental al aparecer el Jueves Santo, mientras toda la clase noble “recorre las estaciones” en sus flamantes carruajes, con un lujoso coche luciendo la bandera de la República francesa, acompañada de un caballero de esta nacionalidad. Pasa luego al Principal de Castellón.
En mayo regresa a Barcelona actuando en la Sala Imperio y vuelve a París, trabajando en el extranjero durante tres años haciendo incluso cine, sobre todo dos películas en Italia: “Il principe di Florania” y “La última danza”, coproducción con España en 1913, junto a Gustavo Serena, un italiano famoso como galán y director del cine mudo.
6 cromos de la película El príncipe de Florania (1914) dirigida por Umberto Paradisi e interpretada por Mario Cimarra, Conchita Ledesma y Gustavo Serena. |
Se estrena en España esta película en 1914 en el Benavente de Madrid. En su gira por Italia en 1914 actúa en el teatro Margherita de Roma, junto a otra artista española, Luisa de Vigné, en el Varieté Maffey de Turín, en el Biondo de Palermo, Politeama de Nápoles, Trianón de Milán, Víarregio y Venecia.
Durante su estancia en Italia se pierde unas semanas en Rusia, llegando a Moscú en diciembre, para trabajar en el teatro Jard durante varias semanas. Al regresar a España, el crítico Enrico Perosi, le hace una demoledora crítica: “…No merece siquiera que nos ocupemos de ella. No basta, para ser llamada artista, vestir bien y ostentar buenas alhajas; hay que hacer algo por conquistar un puesto entre las que valen y Conchita Ledesma se vale de que es española para pasar medianamente. ¡Si fuera compatriota nuestra! Siento tener que decir así desnuda la verdad; pero más vale que engañar a los que se fían de mis crónicas.”
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| Ya representada por la casa Leonard Parish, que solo llevaba auténticas figuras, como “La Fornarina”, en 1915 vuelve a la sala Imperio de Barcelona. Pasa al Liceo de Albacete, Actualidades de Cartagena y Salón Doré de Barcelona. Luego a Eldorado, compartiendo cartel con la danzatrip etíope María Morales, “Perla Negra”. Acaba en el Coliseo Mundial de Tarragona, recalando en el teatro Benavente de Madrid el 12 de mayo, con prórroga y en el Romea donde actúa con “Dora, la Cordobesita”, Eugenia Roca y Rosina que lleva al liliputiense Carlito. El 31 de mayo actúa en el Romea en la función anual de la Asociación de la Prensa madrileña y en junio se despide de los madrileños en el Español en una velada a beneficio del precoz violinista de 13 años, Dámaso Rico y Losada, ganador del premio Sarasate. Actuó también en la Gran Peña de la calle de san Bernardo en Barcelona donde contorsionándose como una gata cantaba un cuplé que tuvo éxito:
original de los músicos Florencio Ledesma y Rafael Oropesa. |
Inicia 1916 en el cine Recreo de Sabadell, donde fracasa estrepitosamente, mereciendo que la crítica diga: “Que con sus canciones no nos ha dado nada”.
Vuelve a Salamanca actuando en el teatro Bretón, coincidiendo con “La Argentinita”, los días 17, 18 y 19 de setiembre de 1916, siendo eclipsada por la personalidad de ésta, que prorroga su actuación dos días más en solitario.
Tenía nuevo domicilio en Madrid, Hortaleza, 24, 3º, luego pasó a Hortaleza, 50, principal y finalmente a Toledo 97, 3º.
Comienza 1917 con una fiesta benéfica en el asilo de La Paloma y pasa al Principal de Jerez, continuando la gira por el teatro del Rey en Ceuta, donde es prorrogada; el teatro Real de Gibraltar; el Imperial de Melilla con triunfo apoteósico pues dura más de un mes en cartelera; Isabel la Católica en Granada; teatro circo Gran Capitán de Córdoba; teatro san Ildefonso de Linares; Campoamor de Oviedo; salón Pradera de Santander; teatro Ayala en Badajoz; Kursaal de Gijón y en el Trianón Palace de Madrid, de Alcalá 20, tras superar una enfermedad, actúa junto a Carmelita Sevilla, la revelación de la temporada, que no deja muy bien parada a Conchita, dados los kilos de diferencia, lo que obliga a la empresa a sustituirla por Olimpia d´Avigny. Pasa a Barcelona al Monte Carlo; al Lírico de Valencia; al teatro Circo de Albacete, junto a la bailarina Mireya; al Kursaal de Melilla, con Mercedes Serós; al Eslava de Jerez de la Frontera; al Llorens de Sevilla y finalmente al Gran teatro de Córdoba. El 22 de noviembre en Cuenca la crítica no puede ser más demoledora: “La exreina de la Mi-Carême, hoy respetable jamona”.
Conchita Ledesma en la portada de Mundo Gráfico del 4 de diciembre de 1918. Hemeroteca Digital |
Escasean sus actuaciones pues solamente tenemos constancia de que 1919 la encuentra en el Fuencarral de Madrid, salón Imperial de Sevilla, Coliseo Moderno de Riotinto, Parque Alfonso XIII de Granada, Ideal Rosales de Madrid y Plaza de Toros de La Coruña.
Inicia el año 1920 en el salón Novedades de Orihuela, de nuevo en el Coliseo Moderno de Riotinto, el cine Ideal de Baza, el balneario Reina Victoria de Cádiz y a partir de junio no tenemos noticia de actuación alguna. En años sucesivos sigue sin aparecer en los escenarios y ni siquiera se anuncia en las publicaciones del ramo.
No volvemos a tener noticias de Conchita Ledesma, suponemos que retirada de los escenarios por alguno de sus numerosos admiradores que le habría “puesto un piso” como se decía en la época. Tal suposición se confirma cuando en 1930 el crítico y amigo “Álvaro de Retana” dice que: “Hace poco se casó Conchita en Úbeda en “artículo mortis” con un rico propietario, que tuvo la suerte de no morirse del todo para disfrutar con su esposa de un Paraíso de venturas matrimoniales”.
Tras su ocultamiento al público y posiblemente ya viuda, en 1953 y con 66 años, interviene en una película española titulada “El duende de Jerez”, dirigida por Daniel Mangrané, con Paquita Rico, Conrado san Martín, Ángel Jordán y Miguel Pastor Mata en que borda el papel de la bailarina “Clavelillos” y dos años después en “Camino cortado”, coproducción hispano alemana dirigida por Ignacio F. Iquino, José Luis Divildos y Alfonso Paso, con un elenco numeroso de alemanes y españoles en la que también interpreta el papel de una bailarina.
Ignoramos la fecha de su fallecimiento.
BIBLIOGRAFÍA CONCURSO BELLEZA
Periódico El Noticiero Salmantino.- Salamanca.Periódico El Adelanto.- Salamanca.
Periódico El Castellano.- Salamanca.
Periódico ABC.- Madrid.
Periódico El Papamoscas.- Burgos.
Periódico La Libertad.- Madrid.
Periódico La Voz.- Madrid.
Periódico El Fígaro.- Madrid.
Revista Blanco y Negro.- Madrid.
Revista El Eco Artístico.- Madrid.
Revista La Unión Ilustrada.- Madrid.
Revista El Arte del Teatro.- Madrid.
Revista Mundo Gráfico.- Madrid.
Revista Mundo Galante.- Madrid.
Revista Nuevo Mundo.- Madrid.
Blog Consuelito y otras bellas del cuplé.- Madrid.
Blog Flamencas por derecho.- Madrid.