Calle de los Apóstoles


Textos en preparación.

Calle de los Apóstoles en el plano basado en
Francisco Coello de 1858 y en 2012















La iglesia de San Marcos
Fotografía de 1967 de Otto Lehmann-Brockhaus, Bibliotheca Hertziana


Aquel año de 1967 fue el peor año de ventas del Dodge Dart en España. Lo fabricaba la empresa Barreiros por concesión de la americana Chrysler. Aquel coche, de apariencia ostentosa pero relativamente asequible, estaba muy lejos de la capacidad económica del español medio, además su consumo era excesivo. Por suerte Barreiros también fabricaba en esos años el Simca 1000, mucho más apto para el "temperamento" español. A pesar de esto, algunos automóviles Dodge se vieron en Salamanca, como este, aparcado en la calle de los Apóstoles junto a la iglesia románica de San Marcos.

Esta iglesia románica, de planta circular y carácter excepcional en España, estaba a punto de ser restaurada ese mismo año de 1967. Con aquella actuación la iglesia quedó finalmente aislada de toda construcción aneja y adoptó la imagen que disfrutamos actualmente, con un aspecto puramente románico. 
La iglesia había sido construida a principios del siglo XII por los pobladores Castellanos junto a la puerta norte de la cerca nueva. En 1202 fue cedida por el rey Alfonso IX, junto al corral o barrio que la rodeaba, a la asociación de clérigos (clerecía) de la ciudad que pasó a denominarse Real Clerecía de San Marcos y que con el tiempo fue una de las instituciones más poderosas de Salamanca. En 1769, tras la expulsión de los jesuitas, la Real Clerecía de San Marcos se hizo cargo del Colegio del Espíritu Santo cuyo edificio fue conocido desde entonces como la Clerecía. La iglesia de San Marcos pasó a ejercer de parroquia hasta que fue suprimida en la reforma parroquial de fines del siglo XIX. Recuperando su condición de parroquia, que sigue ejerciendo hoy en día, avanzado el siglo XX. 
La iglesia sufrió a lo largo de los años diversas modificaciones, como la adicción de un pórtico con cinco columnas jónicas y una sacristía externa en el siglo XVI o levantamiento de una espadaña barroca en su tejado en el siglo XVIII. También recibió varias intervenciones con intenciones restauradoras como la de 1881, para la que el rey Alfonso XII aportó una donación, en la que se restauraron los canecillos de su alero y se abrió una ventana no muy acertadamente. A mediados de 1907 fue derribada la sacristía externa y en febrero de 1908 se hizo lo propio con el pórtico, ambos derribos fueron realizados por la Diócesis sin el conocimiento de la Junta Provincial de Monumentos, alegando estado de ruina. La última reforma-restauración importante fue la mencionada de 1967.


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